Hoy en día, es increíble la cantidad de información y noticias que consumimos a diario, ya sea a través de la televisión, redes sociales u otros medios, esto ha generado cierta tensión en la vida cotidiana de muchas personas causando pensamientos negativos o la simple idea de que las cosas buenas son difíciles de encontrar, así como las propias personas.
Sin embargo y a expensas de que estamos en un mundo digitalizado, la bondad y amor por la humanidad no se ha perdido, al contrario, es cosa de poner un poco de atención a lo que o quienes nos rodean, solo para darnos cuenta que los gestos desinteresados todavía pueden ser tendencia.
Desde hace algún tiempo, los experimentos sociales se han puesto bastante de modo por las sorpresas y reacciones de sus protagonistas, por ello, el siguiente video o enternecedora historia cuenta un caso que brinda la ocasión de reflexionar sobre la situación o problemas de la población.
Todo comienza con el discurso de un padre preocupado por llevarle un regalo a su hija, aún cuando no tiene las posibilidades de hacerlo, primero visita una tienda y le pide a la encargada el favor de darle un presente para su pequeña, ella se niega de inmediato.
En su segundo intento, la empleada se excusa en decirle que no porque no es la dueña y por ello no puede darle un regalo, el padre triste no pierde la esperanza y se dirige a un tercer y último intento.
Cuando todo estaba listo, la señora lo invita a elegir una bolsa para llevar el regalo envuelto, mientras están en el mostrador, el hombre le confiesa que todo se trata de un experimento y que no tiene una hija enferma, que lo único que quería era ver quién se tocaba el corazón para ayudar a una pequeña en problemas.
Finalmente, una señora de una tienda de regalos y envolturas está acomodando mercancía, él llega y le explica su situación, ella piensa un momento pero casi de inmedaito le dice que le dará uno, incluso lo ayuda a escoger el regalo perfecto para la pequeña.
La mujer completamente conmovida le cuenta que ella tiene un hijo enfermo y que por eso no podía negarle la oportunidad a una niña de sentirse así de infeliz en su cumpleaños, con lágrimas en los ojos, el hombre le regala una bolsa y la invita a abrir su presente.
Ella sorprendida poco a poco se da cuenta de lo que hay en su interior, varios billetes a modo de agradecimiento por ayudarlo aún cuando pudo negarse, la enseñanza de este video y experimento social es un bonito mensaje de solidaridad, bondad y generosidad para el resto de la gente que todavía piensa dos veces el ayudar a alguien que lo necesita, le pida o no su apoyo.